Ruinas de Paquimé
El norte del país posee unas ruinas casi desconocidas que no tienen nada que ver con las enormes pirámides que estás acostumbrado a admirar, su nombre es: Paquimé. Un misterioso recinto que suplica más visitas de ávidos viajeros abiertos a la aventura y el descubrimiento.
“Casa grandes”, como también es conocida la zona arqueológica, es resultado de la migración de la “Cultura Pueblo”, proveniente de Nuevo México. Su principal actividad era la agricultura y mantenían una infraestructura bastante desarrollada para su época.
¿Qué hace tan impresionante la zona?
Pues, a diferencia de lo que has visto antes, esta ciudad mesoamericana está compuesta de casas subterráneas divididas en una especie de villas en distribución laberíntica.
Se cree que en su época de esplendor (siglo XIV) estuvo poblada por diez mil habitantes, constituyéndose como el punto clave para el comercio entre el norte de México y el sur de Estados Unidos de América.
Dentro de estás magnificas construcciones se localiza la llamada “Casa de hornos”, lugar en el que es posible distinguir los hoyos que fueron usados para hacer la bebida espiritual llamada “Sotol”, un destilado muy similar al mezcal que no puedes dejar de probar.
En el área de la ingeniería, no le pide nada a otras ciudades contemporáneas, ya que la llamada “Casa de la Noria” tiene una de las construcciones hidráulicas más avanzadas y grandes de la época.
Si, por otro lado, te interesa más el aspecto místico y escalofriante, puedes visitar la “Casa de los Cráneos” y la “Casa de los Muertos”, secciones donde han sido encontrados gran cantidad de restos humanos. Por si fuera poco, de las más de 20 hectáreas de construcción en Paquimé, sólo el 20% ha sido explorado a profundidad. ¡Imagínate!
Chihuahua tiene mucho que ofrecer y sólo se encuentra a unas horas de distancia. Date la oportunidad de visitarlo y te aseguro que al estar en esas ruinas, al pie de la Sierra Madre Occidental, todas las preocupaciones, el estrés, la tristeza o lo que te haya motivado a huir de la ciudad, habrán sido convertido en paz.